El principal interés del cuidado de un jardín es que las plantas ornamentales que en él se cultivan presenten un perfecto desarrollo y todo su valor decorativo. Es indispensable dedicar una atención preferente a los organismos vivos (insectos, arácnidos, hongos, etc.) y factores externos (aire, mal manejo de riego, abonos, etc.) que pueden ocasionar daños a las plantas, por tanto será necesario conocer los medios de lucha que actualmente se disponen para combatirlos, sin olvidar la necesidad de protección personal y del medio ambiente en esas actuaciones.
MÉTODOS DE CONTROL
Es importante conocer los distintos métodos de control fitosanitario a utilizar para combatir los agentes vivos y no vivos, que pueden dañar a nuestras plantaciones y cultivos.
La defensa de éstas plantaciones y cultivos debe estar perfectamente dirigida para que, además de evitar daños, se empleen aquellos métodos que provoquen menores riesgos de toxicidad e impacto ambiental negativo, así como la protección de residuos.
- Métodos legislativos. El material vegetal que se utiliza debe cumplir una normativa que garantice su calidad. Las medidas legislativas velan para que se cumplan estas normas, obligando a que todo el material pase los controles de calidad que garanticen que las plantas están sanas, libres de enfermedades y plagas, y proceden de semillas autorizadas. Entre los mecanismos de control por parte de la Administración se encuentra el Pasaporte fitosanitario. Consiste en una etiqueta que se exige a los productores de material vegetal, comerciantes e importadores, y que indica que esas plantas han sido inspeccionadas en los lugares de producción y manipulación.
- Métodos genéticos. Los actuales conocimientos sobre genética y biotecnología permiten la obtención, mediante selección, hibridación y genética molecular, de variedades de plantas resistentes a determinadas plagas y enfermedades.
- Métodos culturales. Las buenas prácticas culturales y la realización de ciertas labores utilizadas a lo largo de los años han contribuido a controlar el impacto de los agentes nocivos en las plantaciones y los cultivos.
Las medidas culturales han de valorarse como medios de lucha preventivos. Tales medidas incluyen:
1. Selección de lugares adecuados y suelos de cultivo.
2. Apropiadas labores de preparación.
3. Racional abonado.
4. Regulación de la aportación del aire, luz, agua y calor.
5. Cuidados de tipo general.
6. Empleo de las semillas y plantas.
- Métodos físicos. Los métodos de control físicos se clasifican en dos grandes grupos: medidas físicas y medidas mecánicas.
a) Vapor de agua. El agua es un excelente vehículo de transmisión de calor. La desinfección del suelo por calor a través del vapor de agua es un buen sistema para eliminar cualquier tipo de agentes nocivos y semillas de malas hierbas.
b) Solarización. Método de desinfección del suelo que aprovecha la energía solar para aumentar la temperatura de un terreno húmedo y libre de cultivo, mediante el acolchado (colocar una lámina de plástico transparente sobre el suelo duarante los meses de verano).
2. Medidas mecánicas. Evitan o dificultan el contacto directo entre los agentes causantes de plagas y/o enfermedades y las plantas.
a) Barreras.
Mallas (se colocan en todas las bandas y ventanas de los invernaderos, dificultando la entrada de insectos).
Acolchados o mallas de suelo (cubrir el terreno con una lámina de plástico negro que evite el contacto directo de la planta y con la humedad del suelo, evitando aparición de enfermedades y malas hierbas).
b) Trampas.
Refugios (destrucción de los refugios naturales o de creación artificial, que sirven de abrigo invernal a determinadas especies).
Trampas cromotrópicas (trampas amarillas y trampas azules, son láminas de plástico de éstos colores untadas con una capa de pegamento. Las amarillas atraen pulgones y mosca blanca, las azules a los trips).
Trampas de feromonas (sustancias de naturaleza químicas, propias y exclusivas de cada especie, que emite un determinado individuo y son recogidas por otro u otros la misma especie, provocando en ellos reacciones específicas. Pueden ser sexuales, de alarma, de agregación y dispersión).
Trampas lumínicas (atrae a los insectos mediante un foco de luz en donde quedan atrapados).
Atrayentes (se utilizan cebos como alimento apetecible como patatas o remolacha. También hay otras sustancias, no alimenticia, que producen atracción como vinagre y amoniaco).
c) Repelentes. Sustancias o cualquier elemento que alejan al agente nocivo (naftalina o el color azul).
d) Recogida de insectos. Recoger directamente los insectos y eliminarlos.